La colaboración de Escuelas Campesinas de Segovia con CaixaBank y Fundación Caja Segovia continuará un año más en su labor de conservación de la biodiversidad y aplicación de técnicas de secuestro de carbono en los suelos.

En este segundo año de proyecto, Guardianes de Biodiversidad ampliará las superficies de cultivo buscando un mayor impacto en la cantidad de carbono orgánico retenido y se continuará el análisis del paisaje agrario con el registro y análisis de diversos bioindicadores que nos ofrecen una visión más acertada de la calidad del carbono orgánico del suelo y su probabilidad de permanencia en los suelos por un tiempo más prolongado.

A lo largo de este 2021 se han reproducido con éxito diferentes variedades como el trigo chamorro, la sandía amarilla, el tomate chato o el melón de Coca para mantener con vida el banco de semillas, ya se han recogido las semillas, sembrado cebadas y se preparan los huertos para las rotaciones de invierno.

Si quieres escuchar un bonito resumen de la experiencia en este primer año, el podcast de Toma la Tierra recogió en su número 13 dedicado a las identidades rurales una pequeña parte del proyecto. Escúchalo AQUÍ